Vaya, aún no me he sacado el carnet de hortelano (hace falta bastante práctica y superar los exámenes finales para que te lo dén ; ) y ya estoy con las prácticas de peón de albañil, que aunque pudiera parecer que no está relacionado con el huertecillo, lo está, lo está.

El caso es que tener que coger el coche cada vez que voy al huerto para poder llevar la pala, azadas, cubos, … es un poco coñazo, y si tuviéramos allí una casetilla o casilla para dejarlo todo podría ir sin problemas en la bici, hacer lo que hiciera falta y volverme de la misma manera. También podría servir para tener allí los apaños mínimos para un fin de semana en plan barbacoa y tal, lo cual sería cojonudo, claro.

Así que aprovechando que mi vecino de al lado, PPLuis, fue hace algún tiempo maestro de obras, ahora retirado, he marcado (con su inestimable ayuda, por supuesto) la zanja para los cimientos de una casetilla que vamos a hacer, y ahora me está tocando lo más pesadillo, que es cavarla y sacar la tierra fuera para más adelante llenarla de hormigón (o mortero, según se diga) y de este modo crear los cimientos sobre los que luego me ayudarán a hacer los muros de bloques de hormigón, poner 4 viguillas, una techumbre básica, 1 puerta, 1 ventana y en el futuro le iremos añadiendo otras cosillas. Y el procurar hacer todo lo que pueda por mi cuenta, utilizando ayuda renumerada para lo que no tengo ni idea de hacer no solo me resultará más económico que si encargara hacer todo y despreocuparme, sino que me permitirá ir aprendiendo las cosas básicas de albañilería, por aquello que dicen de que “el saber no ocupa lugar”, y a la misma vez no creo que me venga demasiado mal un poco de ejercicio de brazos, espalda y lumbares ; )

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