Sonidos electrónicos: Arquitectura efímera
4 de Junio, 2004   20:50

Alaska, o mejor dicho, su grupo con Nacho Canut, Fangoria, vuelve a la carga, y esta vez con un disco alucinante para los que nos gustan los sonidos electrónicos. Y desde luego se nota la mano de Carlos Jean en la producción; este tío es un fenómeno con las mezclas, las dota de un dinamismo bestial en la que todos los sonidos suenan independientes, sueltos, en armonía con el conjunto, y todas las melodías tienen unas baterías crujientes, bajos profundos, y arpegios eléctricos. Y la voz de Alaska en medio, perfecta, a veces natural y a veces filtrada, ecualizada o vocodeada. Y es que antes un grupo pillaba una batería, una guitarra, un bajo y uno o varios micros y triunfaba. Y no hay que quitarles mérito ni mucho menos, de hecho ahora los conciertos "unplugged" buscan precisamente eso, ver lo que es capaz de hacer un grupo sin aparatos electrónicos. Pero a la hora de disfrutar no hay nada que un buen productor estilo Carlos Jean pille su set de equipos electrónicos (a veces es simplemente un ordenador el que lo hace todo) y haga maravillas. Más alucinante aún es saber que prácticamente el 99% de los sonidos que oímos en una canción de este estilo, son electrónicos o (matemáticos según lo pensemos); no es una guitarra, o una batería real, o un violín; no, se trata de ondas sinusoidales, en diente de sierra, cuadradas,... moduladas por otras ondas de tipos similares, pasadas por diversos filtros para eliminar o realzar ciertas frecuencias que luego son enviadas a procesadores de efectos que añaden distorsiones, ecos, reverberaciones, ... y que suenan a gloria (cuando están bien hechos, claro, porque cuando no simplemente molestan a los oídos). Y es gracias a estos buenos productores cuando uno empieza oír a ciertos artistas que antes no escuchaba. Por ejemplo Madonna no me gustó mucho hasta que algún buen productor se alió con ella y sacaron Frozen. Ahí no es solo Madonna y su voz; es todo el conjunto de sonidos que transforman canciones que son buenas (o medio buenas, dependiendo de cuáles hablemos) en canciones cuasi-perfectas, insisto de nuevo, para los que tenemos estos gustos. Desde aquél LP Madonna ha seguido en esa línea de productores y desde entonces yo disfruto con su música. Así que felicitaciones para estos grandes artistas y sobre todo, para los buenos productores como Carlos Jean.

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